Cuando escribimos, dejamos una parte de nuestras almas en las palabras. Cuando reímos alegramos a otros con nuestras alegrías. Cuando lloramos compartimos el dolor con quienes nos quieren. Cuando vivimos, simplemente crecemos.

martes, 7 de junio de 2011

Tú.

No importa nada más, ni lo que piensen ni lo que hagan. Prefiero no pensar no decir nada, sólo sentir y vivir. Soy como soy y quien me ame me debe aceptar así, quien no me entienda no sabrá apreciarme. Soy atípica, soy compleja y diferente, y es normal que confundan adjetivos al definirme, pero no importa, pues sus prejuicios son sólo suyos. No me imaginé jamás que al yo cerrar esa puerta el abriera la ventana y se sentara a esperarme, porque sabía que yo volvería, hicieron falta años para que yo creciera y él también, para llegar a un punto en el que fuera posible que esto surgiera, un punto en el que nos entendamos, en el que sepamos apreciar al otro por como es y no por como queremos que sea. Llegó este momento, y tu y yo hemos querido mantenerlo en secreto , un secreto que me quema y que alguien está queriendo desvelar, pero no importa, yo seré capaz de callar, de reír y de llorar por ti, por mi, por nosotros. Que digan lo que quieran, que critiquen lo que les plazca, que insulten si eso les hace sentir por encima de mi. Pero realmente quienes lo hacen no saben lo que significa estar junto a un ángel.

No hay comentarios:

Publicar un comentario