Cuando escribimos, dejamos una parte de nuestras almas en las palabras. Cuando reímos alegramos a otros con nuestras alegrías. Cuando lloramos compartimos el dolor con quienes nos quieren. Cuando vivimos, simplemente crecemos.

domingo, 22 de mayo de 2011

Simple pero a veces difícil de admitir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario