Cuando escribimos, dejamos una parte de nuestras almas en las palabras. Cuando reímos alegramos a otros con nuestras alegrías. Cuando lloramos compartimos el dolor con quienes nos quieren. Cuando vivimos, simplemente crecemos.

lunes, 6 de agosto de 2012

PSS

Recuerdo días extraños en los que me sentía sola y tu llegaste y los llenaste de ilusiones, de razones, de motivos para seguir. Nuestra relación acabó, los besos, el sexo, la compañía de tu corazón y el mío, el ser solo una en esas noches donde todo lo dábamos.  Pero pese a eso, pese a lo que ha costado superarlo poquito a poquito se nos va dando mejor esto de ser amigas, porque siempre lo hemos sido. Juntas estamos transformando un "pase lo que pase" que en principio era romántico a uno que es lo más real posible : la amistad. Porque cuando he llorado tú has estado ahí, cuando me han desilusionado tú has estado ahí (pese a lo duro que te fuera estarlo), cuando hemos tenido que discutir lo hemos hecho, has soportado mis "no quiero que me vuelvas a hablar" y has luchado porque no dejara de hacerlo, te has empeñado en seguir siendo la que más gilipolleces me dice al día, y la persona que más me hace reír. Eres una imbécil y lo sabes, sabes que esto es duro, y que lo seguirá siendo, que a veces se me va la pinza y esas cosas, y otras veces se te va a ti; pero somos dos que parecen veinte, y cada día un poco más me voy asegurando de que jamás perderé a mi princesa, porque siempre lo serás, una princesa moco, pero una princesa. Mil momentos nos unen pequeña, y mil más nos seguirán uniendo, no me cabe ninguna duda, porque sabes? te quiero muchísimo joder, y soy incapaz de perder a mi amiga por muy egoista que sea a veces, porque es que... te necesito todos los días de mi vida. Bueno... sobran, pero GRACIAS!

1 comentario:

  1. ¿Por qué está tu blog de negro? ¿Por qué esa obsesión con el amor? El límite entre la amistad y el amor es muy peligroso, ¿no crees?. Si estás segura de vuestra amistad y no quieres provocar ningún tipo de malentendido, no te dejes llevar. Evita protagonizar situaciones que puedan acabar mal: noches para dos con demasiado vino, masajes relajantes sin fin, juegos de seducción para confirmar el atractivo de una misma, etc.Si notas que vuestra amistad empieza a tomar otro tono y quieres que así sea, ¡dilo! Expresa claramente lo que sientes por la otra persona y pídele que se lance. Pero debes tener en cuenta que corres el riesgo de que no te corresponda. Si al contrario, sientes que tu amiga empieza a sentir algo por ti, no la marees y hazle entender con sutileza que para ti es como un hermana.

    ResponderEliminar